Exposición de Carmen Vila "Ritmo suspendido" en el Alcázar Genil
- JOSÉ VALLEJO
- 18 jun 2015
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El universo técnico del arte nazarí se alimenta de la cerámica como elemento fundamental de sus suelos y zócalos, que hacen el debido contraste especular con las yeserías de las partes altas y las armaduras de madera que cubren estos espacios. En el aspecto formal, la lacería es un componente fundamental que ordena y dota de color, que juega con la luz y el reflejo y crea unos misteriosos tapices geométricos.
Ritmo suspendido es la conjunción de estas premisas materiales y formales, realizada por la artista Carmen Vila, que se atreve a irrumpir en el espacio de la qubba nazarí de Alcázar Genil, para lo que teje una red geométrica que intersecta la altura de la torre y forja la aparición semitransparente, entre suelo y techumbre, de una malla tendida en el aire que articula el espacio, fortaleciendo el espíritu místico de la estancia.
José Vallejo

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